Como una estrella de cine

Pues así , ni más ni menos, me he sentido esta semana pasada disfrutando de la 59 edición de Seminci, la semana de cine de Valladolid.

Este año la Seminci ha venido cargadita de novedades y la verdad es que han sido todas muy de mi agrado y por lo que he vivido asistiendo a proyecciones y diversos actos del festival, han dado en el clavo con todas ellas puesto que el público asistente las ha disfrutado tanto como yo.
En primer lugar este año la Seminci ha tenido la genial idea de dotar al glamour de la alfombra roja, tanto en inauguración como en clausura, de nombres muy vallisoletanos que cada vez tienen más peso en el mundo de la moda.
Diversos diseñadores de moda de la ciudad como Esther Noriega, Cesar González, Ahinoa Salcedo  o Natacha Arranz (por citar  algunos de los nombres con más proyección) así como de complementos como Pablo y Mayaya, de calzado como Rocio Mozo e incluso de joyería( sip, aquí también se diseñan joyas y bisutería)  han hecho que las estrellas invitadas al festival se adornaran con las últimas tendencias creadas desde Valladolid, realzando aún más si es posible la belleza de las actrices que han participado de esta edición del festival de cine.
Un acierto, puesto que han sido muchos los medios que han aplaudido la elegancia y el estilo de quienes se han engalanado con piezas de estos jóvenes artistas de la moda.

Yo la verdad es que aprovechando mi buena relación con alguno de los diseñadores a punto estuve de pedir que me prestaran un modelito, pero dado el excelente tiempo que nos ha acompañado durante toda la semana no he querido sudar nada prestado, que esto de ser un bicho peludo tiene sus inconvenientes, ahora, en invierno se agradece mucho.
Ya en la gala de inauguración, disfruté horrores viendo como mi queridísima Verónica Forqué

recibía la espiga de honor del festival de manos de su compañero y amigo, Jorge Sanz.
Imanol Arias, El Teatro Calderón, El Norte de Castilla o la bodega Vega Sicilia han sido otras de las merecidísimas espigas de honor de este año.
Y es que el vino ha ocupado su lugar este año, puesto que en un festival como la Seminci, realizado en una ciudad como Valladolid, era lógico que se le dedica´ra una especial atención a la relación existente entre el cine y el vino, así que se ha incorporado una nueva sección al festival: Cine&Vino,

en la que periodistas especializados en semejante maravilla participaron en una impresionante gala de inauguración de la sección junto a mi idolatrado Jose Luis Cuerda, al inteligentísimo Santiago Tabernero o al actor y experto en la materia Imanol Arias, así como al presidente de la Academia de gastronomía de Castilla y León y al sumiller reconocido con la distinción de "nariz de oro", que le acredita como el que seguramente sea el mejor catador de caldos de este país.
Además de acompañar sus intervenciones con escenas de diversas películas y con la proyección de una cinta centrada en esta deliciosa temática, durante la gala celebrada en el LAVA, cuatro de las D.O de la provincia aportaron más de cien marcas distintas de vino para ser degustados por los asistentes, así como los multipremiados reposteros de Da Silva Gastronomía, presentaron su más que impresionante y original colección de bombones de vino, un producto que ha despertado la admiración de multitud de enólogos que aseguran reconocer en ellos las diferentes notas de cata de aquellos vinos con los que se han elaborado.
También Tierra de Sabor aportó un excelente jamoncito para que el público asistente pudiera empapar los vinos de la mejor de las maneras.
La presencia de los reposteros de Da Silva en el festival ha sido otra de las novedades de este año ya que además de participar en las diversas galas de Seminci, han creado un bombón único con el mismo nombre del festival y para la ocasión, obsequiando con bombones Seminci a todos los invitados.

Obviamente sobra decir el excelente trabajo realizado por parte de Enoturismo de Valladolid, que también ha estado presente en todos los momentos importantes del festival, así como el de nuestros hosteleros quienes han surtido de gran variedad de delicatesen los denominados "cocteles del Director" celebrados a diario.
Y que decir de los mojitos que los profesionales de ese establecimiento tan especial, el Herminios

Jazz han elaborado para las galas de inauguración y clausura, siendo además su local punto de encuentro para los asistentes al festival, llegando incluso a realizar una fiesta mítica para  los participantes en el día del corto español, donde además de servir unos combinados excelentes, llevaron a pinchar a la excelente Dj vallisoletana Marta, Fever Guirl, quien hizo bailar a los asistentes con el ritmazo que la caracteriza siempre que se pone a los `"platos" ,

donde recaban los mejores y más divertidos vinilos de funky, soul y rock  por citar algunos de los estilos con los que suele amenizar las diversas veladas donde he tenido la ocasión de verla en acción.
Cines y teatros llenos, la ciudad a tope y muchísimo ambiente cinéfilo por las calles de Valladolid.
El festival ha seguido con la tradición que instauró el pasado año con gran acierto de invitar a blogueros especializados a disfrutar de la semana de cine de Valladolid y he podido saludar a algunos grandes amigos como Monidala Jones, bloguera experta en cine o Fernando de Terroaristas y Rafa de Bodega Ateneo, ambos blogueros expertos en vino, con quienes además disfrute muchísimo en la gala de inauguración de la nueva sección que combina de manera fantástica dos de mis grandes placeres: el buen cine y el buen vino.
Ha sido esta una edición impresionante y lo que voy viendo según pasan los años es que el festival al igual que el buen vino o la ciudad de Valladolid, va ganando con el tiempo. ya es un impresionante "reserva",
Seguro que cuando lo descorche el próximo año me va a saber a gloria bendita.

Paseos de otoño

Pues la verdad es que aunque sea un título de lo más cinematográfico, en esta entrada quiero hablaros de lo fenomenal que es Valladolid para pasear en esta estación, generalmente asociada a lo desapacible y lo triste.
Todo lo contrario.
Desde la Oficina de Turismo de Valladolid se han dado cuenta de que las ciudades son para disfrutarlas durante todo el año, no vas a salir solo en primavera o en verano, y han creado una serie de rutas y de visitas guiadas para todos los gustos y edades.
Algunas de estas visitas guiadas cuentan además con el aliciente de ser "dramatizadas" es decir, una serie de actores y actrices caracterizados estupendamente aportan una nota de realismo al recorrido apareciendo puntualmente para que los asistentes a las visitas descubran así parte de los sucesos que acontecieron en aquello que se está visitando.
No me digáis que no es genial.
Valladolid tiene muchos atractivos turísticos y estas rutas y visitas completan el programa que uno puede hacerse durante a la escapadita por la urbe, siempre imagino de la mano del turismo gastronómico y del enoturismo, dos de los mayores atractivos de la ciudad y que están llevando el nombre de esta tierra por todo el planeta.

Estas visitas teatralizadas abarcan diversas temáticas y contamos además con una específica sobre el paso imborrable de Santa Teresa por la ciudad, quien dejó su esencia en algunos lugares de Valladolid donde aún se puede sentir su huella.
La verdad es que esto es igual de interesante para aquellos que nos visitan desde otras ciudades u otros países, como para los mismos vallisoletanos, quienes a fuerza de costumbre y de lo cotidiano, a veces no reparan en la cantidad de curiosidades y de lugares especiales que oculta la ciudad.
Está fenomenal también la oferta de rutas y actividades concebidas para disfrutar en familia, puesto que los pequeños quizás abusan demasiado de las videoconsolas y de la televisión y esta es una estupenda manera de aprender infinidad de cosas de forma amena y divertida.
A los pequeños lógicamente no les voy a hablar de enoturismo, ya llegará su momento de descubrirlo y entusiasmarse con el, pero hay muchas cosas que les pueden encantar y seguro que sus padres se felicitarán cuando les vean disfrutar sin un mando en la mano y sin estar pegados a una pantalla.

Y si no se es mucho de pasear  y se prefieren otras opciones más rápidas o cómodas, aquí tenemos también un estupendo bus turístico que recorre la ciudad y que resulta muy útil para aquellos que tiene menos tiempo para conocer Valladolid.
Otra gran opción es aprovechar lo llana que es la metrópoli y lo bien planteada que está para visitarla en bicicleta, ya que se pueden alquilar bicicletas turísticas y recorrer Valladolid dando unas cuantas pedaladas.
Son muchos los vecinos  que utilizan este medio de desplazamiento y es estupendo, siempre que no llueva mucho y que se tenga un mínimo de prudencia y de respeto por los peatones y por los usuarios de otros vehículos, ya que uno en bicicleta puede ocasionar sin quererlo incidentes peligrosos, del todo evitables si se atienden las normas más elementales de tráfico y de urbanidad. Eso implica también el respeto que todos los ciclistas deben recibir de conductores de automóviles y vehículos más voluminosos.

En fin, que se presenta un otoño muy completito y con gran variedad de propuestas para todos los que quieran disfrutar de Valladolid y en Valladolid.
Para concretar y reservar plaza en cualquiera de las visitas no hay más que ponerse en contacto con la Oficina de Turismo de Valladolid, bien acercándose por su sede junto a la Acera de Recoletos o llamando por teléfono al número 983219310 donde os atenderán amablemente.
Y si os encontráis con un pequeño bichejo peludo por la calle no os asustéis, que no muerdo ni hago nada, eso si, no me mojéis ni me deis de comer después de las doce aunque os lo pida poniendo ojitos.
Disfrutad tanto de esta ciudad como lo hago yo.